Con solo 22 años, Nicolás Caytuiro se ha convertido en uno de los estudiantes más jóvenes en cursar el Doctorado en Computación del Departamento de Ciencias de la Computación (DCC) de la Universidad de Chile. Actualmente, desarrolla su investigación en el área de visión por computadora, específicamente en modelos generativos 3D, bajo la supervisión del profesor Iván Sipirán.
“Nos dimos cuenta de que, aunque muchos modelos generativos 3D buscan producir objetos de alta calidad, la simetría rara vez se considera explícitamente en el diseño de las arquitecturas o durante el proceso de generación. Esto resulta contradictorio, ya que creemos que la simetría es una característica clave para percibir un objeto como de alta calidad”, explica Nicolás sobre el foco de su investigación.
Originario de Cusco, Perú, Nicolás completó sus estudios de pregrado en 2023, titulándose como Ingeniero de Sistemas por la Universidad Católica de Santa María, Arequipa, a la edad de 21 años. Su trabajo de titulación también se enfocó en visión por computadora, aunque en imágenes 2D. “Quería seguir capacitándome y profundizar en este campo, que hasta entonces consideraba emergente. Esa fue una de las razones por las que postulé al doctorado, al que ingresé con 22 años”, cuenta.
Inicialmente aplicó al programa de Magíster en Ciencias mención Computación, por recomendación de sus profesores en Perú. Sin embargo, fue gracias al consejo de la profesora Nancy Hitschfeld Kahler, coordinadora del programa, que se animó a postular directamente al doctorado, comenzando sus estudios en el semestre de primavera de 2024. “Elegí la Universidad de Chile porque siempre he seguido de cerca su liderazgo en investigación y las oportunidades que ofrece a estudiantes, como becas y financiamiento para extranjeros. Además, el DCC destaca por su producción científica en visión por computadora, y sentí que podía aportar con mis conocimientos y crecer como investigador”, comenta.
A pesar de su juventud, Nicolás mira con orgullo el camino recorrido. “No ha sido fácil, pero gracias al apoyo de mi mamá, mis abuelos maternos, mi familia y mentores —el Dr. Benjamín Maraza y la Dra. Eveling Castro Gutiérrez— logré algo que antes me parecía imposible. Haber rendido ya el examen de calificación es un primer hito importante, pero sé que aún tengo mucho por aprender. Asumo este desafío con entusiasmo y responsabilidad, con la intención de aportar una mirada fresca, nuevas ideas y energía al programa”.
Actualmente, Nicolás es estudiante afiliado al Centro Nacional de Inteligencia Artificial (CENIA) y, junto al profesor Sipirán, es cofundador del laboratorio Shape Vision, un espacio en el que académicos y estudiantes —de pregrado, magíster y doctorado— investigan en conjunto temas de vanguardia en visión por computadora.
De cara al futuro, Nicolás se proyecta tanto en la academia como en centros de investigación de alto nivel, como NVIDIA, Meta o Google. “Me motiva la posibilidad de generar nuevo conocimiento, formar a futuros investigadores y contribuir al desarrollo científico en mi área. Creo que la academia es un espacio único donde la curiosidad, la creatividad y el rigor científico se combinan para generar impacto, tanto en el ámbito académico como en la sociedad”.
--
Comunicaciones DCC